Corazón de Cristal.

Desde los principios de mi adolescencia, siempre quería saber lo que era tener pareja, el sentirse amado, el sentir el tacto de un amor especial. Pero me olvidé por completo del dolor.

A día de hoy, después de haber pasado por todo, no sé como me siento, para qué voy a mentir, si vengo aquí a escupir mis sentimientos para poder verlos, porque de verdad que todavía no lo sé, no los entiendo, es todo tan contradictorio. 

Me siento entre lleno de rabia, cargado de dolor, con el corazón destrozado y la boca sellada. 

Mi cabeza ahora mismo es un cóctel de dramas, desde cosas reales hasta cosas que la cabeza se imagina y por las que incluso el corazón llora.

No sé si realmente tendría que escribir esto, y mientras lo escribo, no sé si va a ser publicado porque no sé que va a salir de aquí, simplemente me desahogo por aquí porque es necesidad, no aguanto más el dolor en el cuerpo, necesito desahogarme y respirar.

Mi cabeza está dando vueltas constantemente, ahora pienso una cosa y en un rato otra, ahora estoy bien y en cinco minutos estoy gritando en silencio y arrastrando el sentimiento, es todo un caos.

Todo se hace más difícil cuando te sientes un incomprendido, a veces siento que soy un gilipollas que no he sabido dar lo que debería, a veces me arrepiento de haber sido tan estúpido.

Mis ojos ven cosas que desearían no ver, mi corazón entiende cosas que ojalá no entendiese, y mi cabeza, ¿dónde está? porque siento que la he perdido, siento que no siento, que no me siento. 

Veo que solo sé crear caos en toda esta situación, que llevar todo por un buen camino, a mi lado, es imposible, no he sido celoso, pero ahora los celos me comen, no puedo soportarlo.

No quiero sentir que te hago daño, me da la sensación de que en muchos momentos soy un estorbo, he llegado a pensar que soy un puto monstruo, que doy asco.

Esta sensación me tiene sin fuerzas, han pasado tantas cosas después de todo, que me hacen pensar si realmente te he dado lo que te merecías, si he sido lo que debería de haber sido, tú dices que sí, yo no lo sé.

Quizá la gente tenga razón, porque solo he visto cosas en mi contra, o mejor, vamos a decir «no a mi favor», todavía no he visto a esa persona que antes de hablar venga y me pregunte algo, solo he visto cosas rollo «es que ****, yo siempre he visto que Rubén no te miraba como tú a él». 

¿Sabéis? Esas cosas duelen, a mi me parece genial que déis vuestra opinión, pero las cosas hay que decirlas con un poco de tacto, y más en situaciones delicadas, que ser sincero no significa tener que hacer daño.

Yo considero que he sido bueno en todo, nunca he ido a hacer daño, he enseñado todo lo que sabía, y he dado todo lo que podía y tenía. Lo que yo he sentido, siento y sentiré, solo lo sabemos él y yo. No sé qué hacéis terceras personas metiéndoos en sentimientos que no os incumben.

Quizá no he sido suficiente y todo lo que ha venido después ha sido por carencias del pasado, no sé, estoy que no sé nada, no sé ni lo que acabo de escribir hace 10 minutos. Yo lo que sé es que he dado todo lo que he podido, he pasado por situaciones que no desearía a nadie (fuera de la relación), ha habido muchos factores que han afectado a todo, no he tenido una buena temporada, y, en vez de preguntar, es más fácil opinar sin saber.

Ya no sé si mi corazón llora por impotencia, por recuerdos, por imágenes que me vienen a la cabeza, por el presente, o por qué coño llora, pero solo quiero que pare. Quiero sentirme como soy.

Tengo un cacao en la cabeza que no me lo creo ni yo, me siento entre pensamientos y sentimientos, entre un alivio y una carga.

Digan lo que digan, vaya todo como vaya, yo solo sé, juro, y afirmo que, como poco, te quiero la vida, te adoro.

-Soy un alma en ruinas-

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